Circula en las redes sociales un video a favor de la campaña de Mockus gravado por actores y actrices, que podría titularse; “párele bolas. Yo estoy con Mockus”.
El hecho que personas de la farándula, quienes por lo general viven en un mundo de fantasías donde sus apremios no coinciden con los de la gente común y corriente, se involucren en la política y lo hagan de frente y a mutuo propio a favor de una candidatura dice bastante del sentimiento que Antanas y Fajardo han logrado despertar entre los Colombianos.
Después de que el cantante Juanes anunciara su respaldo a Antanas, el gremio de la farándula puso a disposición de la causa lo que tienen sus potencialidades; el poeta hizo versos, el cantante canciones y el pintor los siguió, pincel en mano, dibujando en el porvenir de la esperanza.
En el video de Viky Hernández, Diego Cadavid, Margarita Rosa y sus amigos de la tele se diagnostica como la causa de los males que afectan al país; pobreza, corrupción, violencia, desempleo y más, a la ilegalidad. No han dicho nada nuevo, empero el hecho de que lo hagan quienes tienen algún tipo de ascendencia sobre la opinión, y la forma como lo hacen, nos permite pensar en que no todo está perdido, que algo está pasando y hay guardián en la heredad.
La publicidad de la referencia, espontanea por demás, a favor de Antanas promueve la cultura de la legalidad. Volver a respetar la ley es el propósito. En la subcultura de la ilegalidad es normal lo que Gonzalito llamo “el todo vale”. Para ser rico me puedo quedar con la plata de pueblo, que es sagrada, como dice Antanas, para elegirme en un cargo de elección puedo comprar los votos o violentar con el fraude los resultados de la registraduría y para tener poder puedo traquetear y matar.
El profesor le imprimió al debate por la presidencia otra lógica, y lo aparto de la retorica terrorista al que lo pretendían reducir. La Farc y Chávez son el coco y único tema de discurso. Si no continua el Uribismo el 8 de agosto avanza una división mecanizada de Chávez a tomarse la Guajira, la Farc vuelve a las carreteras a secuestrar en las tristemente celebres pescas milagrosas.
Con Toda esta retahíla terrorista se amedrento al ciudadano incauto, quien con tanto miedo prefiere no discernir, al fin y al cabo, no puede haber nada peor que la Farc o Chávez. Ni si quiera los falsos positivos, las chuzadas a la oposición y a los magistrados de la Corte, la pobreza que se agudiza, la violencia urbana en donde el homicidio a dirigentes comunales, sindicales y personas del común, aquellas que no merecen ni una recompensa, campea sin autoridad que la venza.
No he leído un solo artículo de los escritos por quienes orientan a la opinión donde se descalifique a Antanas, con excepción de los cancerberos del régimen, todos coinciden con lo que piensa la opinión libérrima y consecuente, que se trata de un hombre honesto y trasparente.
Antanas no tiene la oratoria de Gaitán, ni la de Galán, empero coincide con los dos en su retorica. Se le tiene confianza, convence con la palabra, trasmite seguridad, nadie pone en duda su honestidad y condición de líder.